23/01/2007 Federico en brazos del tío Gerardo Agüero; y la tía Tini. Tucumán 1985
[No todo en la vida se trata de elegir, a veces se trata de permitirte ser elegido.
No se trata de qué quiero yo de la vida sino de qué quiere la vida de mí.
No es qué quiero yo expresar sino qué quiere expresar la vida a través de mí.
Cuando te das cuenta de que ni siquiera hay un yo que elija, cuando sueltas a tu personaje
con sus necesidades y deseos, se manifiesta el Universo con su profundo mensaje a través de ti,
llenando cada uno de tus rincones.
Y resulta ser que el deseo del Universo siempre fue tu deseo más real.
El Universo parece estar fuera pero se manifiesta desde dentro. Es el mismo amor atravesando todas tus barreras.
Somos el mismo amor bajo vastos mecanismos de defensa, aparentemente infranqueables.
Pero una vez que este gran amor empieza a tocarte por dentro, no hay vuelta atrás. Este amor lo derrite todo, te derrite a ti,
nos derrite a todos y lo único que queda es él mismo.
El Amor, solo Uno.] No conozco el autor.